domingo, 19 de abril de 2020

F - Desventaja Estratégica.


Se comprende ahora, luego de conocer el Terrible Secreto de Maya, el alcance de la pregunta anterior. La técnica arquemónica no puede consistir en el mero recorte de un plano, en el cercado de un área cualquiera del mundo, pues la realidad del Valplads no es un ámbito estable; por el contrario, "el mundo" entraña el Secreto del Maya: una plurivocidad de espacios de significación en los que el virya, su microcosmos potencial, tiene existencia efectiva; la plaza ganada al enemigo ha de ser, entonces, un ESPACIO PLURIDIMENCIONAL que con­tenga íntegramente al microcosmos y evite toda posibilidad de ataque, alteración o mutilación, por parte del Demiurgo, a través de los espacios oblicuos.
Aquí es donde pierde validez la expresión matemática que dimos para hacer intuitivo el principio del cerco: "toda curva cerrada divide su plano en dos partes"; esta fórmula, es eviden­te, SÓLO DESCRIBE UNA CUALIDAD DEL CERCO PRESENTE EN UNOS POCOS ESPACIOS ADYACENTES. Pues ¿qué ocurre en aquellos espacios donde una curva cual­quiera, por ejemplo, un círculo NO PUEDE DEFINIRSE? Respuesta: que el cerco carecerá de existencia, "de significado contextual", es decir, no cumplirá su función aisladora, quedando el virya, en ese espacio, indefenso ante el ataque enemigo. Tal estado de indefensión se denomina DESVENTAJA ESTRATÉGICA.
En nuestra novela "La Extraña Aventura..." se define la desventaja estratégica en térmi­nos que conviene recordar "...analógicamente, la desventaja estratégica equivale al PUNTO DÉBIL EN UNA MURALLA; es el caso desesperante de aquéllos que, habiendo sido sitiados por el enemigo en una plaza amurallada, comprueban con espanto que la misma es incapaz de resistir a la presión enemiga y se halla presta a ceder en un PUNTO DÉBIL. El desastre que sucede a la caída de la Plaza es análogo, también, a la pérdida de la razón en un virya con in­suficiente voluntad egoica como para conservar el equilibrio durante los estados de conciencia irracionales subsiguientes. Es decir: la locura. Por otra parte, la caída de una Plaza Fuerte ja­más representa una victoria para el sitiador como una derrota para el sitiado. Al sitiado le co­rresponde la responsabilidad de la caída pues ha faltado a la ley estratégica que dice: "jamás se debe levantar un cerco si no se dispone de los medios para defenderlo". El cerco estratégico (arquémona) separa al virya del mundo, otorgándole el TIEMPO NECESARIO para acudir a su CENTRO CARISMÁTICO. De un lado del mismo queda el mundo del Demiurgo con su formidable Estrategia Evolutiva y Sinárquica; del otro el virya, auténtico monje-guerrero, ca­ballero del Graal, decidido a alcanzar la Verdad".
"Midamos las fuerzas en juego: sobre el cerco convergen, por un lado, la Estrategia Si­nárquica del Demiurgo y, por el otro, la Estrategia HIPERBÓREA del virya, la cual depende para su concreción de la intrepidez y del valor que se arriesga para alcanzar el centro; en sín­tesis, el éxito de la Estrategia HIPERBÓREA depende de la pureza sanguínea del virya".
"Por último agreguemos que, cuando se ha levantado un cerco, el cual ha irritado al enemigo y le ha llevado a concentrar terribles fuerzas para su abatimiento, no resulta fácil re­troceder a la situación original de ausencia de conflicto SIN QUEDAR EN DESVENTAJA ESTRATÉGICA. En efecto, cuando se ha declarado la guerra, y el enemigo ha desplazado sus fuerzas, son dos las alternativas: o se afronta el combate resistiendo el sitio enemigo mientras se busca OTRA PUERTA PARA SALIR, o se rehuye la lucha difiriendo las acciones e igno­rando la presión enemiga. En este segundo caso, el enemigo irá aumentando la presión de tal manera que finalmente las murallas cederán y el desastre será inevitable; ha fracasado la Estra­tegia propia porque se la ha reemplazado durante las acciones. Nos explicaremos mejor. Cuan­do un virya levanta un cerco, en el marco de una Estrategia HIPERBÓREA, PARA INICIAR LA CONQUISTA DEL VRIL, su Estrategia sólo le permite UNA alternativa: ABRIR LA PUERTA INTERIOR para sortear el despliegue de las fuerzas demoníacas. Sólo una alternati­va. Lo contrario significa lisa y llanamente un cambio de Estrategia; y esto lo sabía hasta CLAUSEWITZ: NADIE PUEDE CAMBIAR DE ESTRATEGIA EN MEDIO DE LA GUE­RRA SIN ARRIESGARSE A PADECER GRAVES PÉRDIDAS. En la guerra convencional lo máximo que se admite de una Estrategia es que ofrezca tácticas alternativas, pero jamás que ella pueda ser cambiada en sí misma, lo que significaría en realidad UN CAMBIO DE OB­JETIVO (posibilidad inadmisible en una Estrategia HIPERBÓREA) que plantearía severas dudas sobre la capacidad del Estado Mayor que la planificó y hasta sobre la validez de la jus­tificación que siempre se debe aportar por haber adoptado el camino bélico".
En conceptos analógicos, pero que trasuntan claramente los peligros latentes, el párrafo citado nos revela la precaria situación de DESVENTAJA ESTRATÉGICA en la que quedaría todo virya que fracase al aplicar el principio del cerco.
El terrible secreto de maya nos ha mostrado que el cerco NO PUEDE SER CUAL­QUIER CURVA sino un "principio universal", cuyo sentido, expresado por el signo corres­pondiente, sea significativo EN TODOS LOS MUNDOS POSIBLES DEL DEMIURGO. De aquí nuestras anteriores advertencias sobre la necesidad de que el Yo despierto OBLIGUE POR EL ENGAÑO, es decir, ESTRATÉGICAMENTE, a su sujeto cultural a que represente racionalmente, como mito o símbolo sagrado, el principio arquetípico del cerco. Sin embargo, la búsqueda del principio del cerco aún requerirá de algunas reflexiones en otros artículos, especialmente para mostrar, con alegorías, el modo como los Siddhas de Agartha procuran iniciar carismáticamente, a todo virya, en la técnica arquemónica.



No hay comentarios.:

Publicar un comentario